“No perderé mi prestigio a nivel global, con 30 años en la industria del fútbol, por la soberbia del presidente de la AFA”, dice Guillermo Tofoni desde Europa, donde está de viaje. Hace unos días, el empresario y organizador de partidos amistosos había denunciado en la Justicia a la entidad a la que preside Claudio “Chiqui” Tapia. La figura legal es defraudación. En los documentos presentados, Tofoni asegura que la institución desconoció un contrato en vigor hasta el 31 de diciembre de 2030. El convenio le daba exclusividad al dueño de la empresa World Eleven para gestionar los partidos amistosos del seleccionado argentino.
No obstante, según consta en la presentación judicial, AFA contrató a otra empresa para los últimos dos encuentros, ante Curazao y Panamá, y no respetó el acuerdo firmado. Tofoni aporta más datos y, según consta en la documentación, la nueva encargada de armar los partidos es ProSport Live LLC, que tiene domicilio fiscal en el estado de Florida, Estados Unidos. Se trata de una compañía ignota en el mercado.
La investigación judicial quedó a cargo del juez Julián Ercolini, del Juzgado Criminal y Federal 10, y del fiscal Eduardo Taiano. Este jueves, el magistrado emitió un despacho en la causa con medidas de prueba. En primer lugar, citó a declarar a María Cimino, apoderada legal de AFA. La letrada tendrá que acudir como testigo a los tribunales el 10 de mayo a las 10 de la mañana. Además, Ercolini libró un exhorto a la justicia de Miami “para que brinde toda la información relativa a la sociedad ProSport Live LLC”.
La raíz del conflicto
Tofoni supo a comienzos de este año que estaba fuera del negocio de los partidos amistosos de la selección campeona del mundo. Recibió en su empresa una carta de dos páginas firmada por Cimino, la apoderada legal de AFA que fue citada a declarar como testigo. “Niego que el pasado 4 de mayo de 2021 la AFA haya suscripto con World Eleven y/o con Ud. un contrato de representación exclusiva, y/o cualquier otro, y/o que se encuentre vigente cualquier vínculo contractual y/o de cualquier otro tipo entre World Eleven y/o Ud. y mi representada (es decir, la AFA)”, dice la notificación a la que tuvo acceso LA NACION. Dicho de otro modo, AFA no les rescindía a Tofoni y su empresa un contrato que estuviera vigente y rigiera hasta el último día de 2030: directamente, desconocía tal vínculo.
Hay más: a la hora de justificar el desconocimiento del contrato (que Tofoni presentó en la Justicia y lleva la firma del propio Tapia y del secretario ejecutivo de la presidencia de AFA, Pablo Toviggino), la apoderada de la entidad deportiva cita como explicación que dicho convenio no ha pasado por el Comité Ejecutivo, tal como lo manda el estatuto. Otro dato: en la notificación a la empresa de Tofoni, AFA le recuerda que aquella compañía no objetó el partido entre Argentina y Emiratos Árabes Unidos jugado en Abu Dhabi antes del Mundial Qatar 2022. “World Eleven carece de legitimación para deducir oposición alguna respecto a la forma en que esta asociación, ÚNICA TITULAR DE LOS DERECHOS [así, en mayúsculas], organiza los partidos internacionales amistosos de la selección argentina de fútbol”, dice la notificación de AFA que encendió la ira de Tofoni, y que motivó su denuncia.
