Por Cornago Gonzalo
Tomó la pelota detrás de la mitad de la cancha y avanzó con fuerza y convicción. La misma convicción con la que dejó su Ramirez natal, para instalarse en la pensión de Boca allá por el año 2017. Como en aquella oportunidad, nadie lo iba a poder detener. Su objetivo, lo tenía muy claro. Una vez que ese misil teledirigido se metió contra el palo del arco millonario, Saraleguí inició una carrera alocada con los brazos abiertos y la boca llena de gol.
Inmediatamente sus compañeros lo hundieron en una montaña de abrazos. Era una maza uniforme de camisetas xeneizes. Una vez que pudo salir de allí, se paró de frente a la tribuna popular: llevo sus manos detrás de sus orejas y sus ojos explotaron de lágrimas. Ahí arriba, hacia donde él señalaba insistentemente con su dedo, estaba su familia. Los que lo acompañan y apoyan en todo momento. Los únicos que como él, saben cuánto habían esperado este momento
Hincha fanático de Boca, Jabes Saralegui está casi viviendo un sueño. Después de mucho esfuerzo y dedicación, ve como el gran anhelo está cada vez más cerca de concretarse: entrar a La Bombonera repleta para defender los colores del club del cual es hincha.
Los primeros pasos del futbolista oriundo de General Ramírez tuvieron lugar en el Club Atlético y Deportivo Roma, donde Jabes, a los 6 años, comenzó a practicar fútbol. Luego fue invitado por el Club Atlético Unión de Crespo para que entrenara en la Capital Nacional de la Avicultura, donde estuvo durante tres años hasta dar su paso a Boca.
Jabes está en la institución xeneize desde el año 2017 y su evolución ha sido constante: “He ido mejorando en todos los sentidos, principalmente a la hora de marcar que es lo que más me costaba. También mucho en lo físico, la primera semana ya me había dado cuenta de que mis compañeros estaban en otro nivel y debía esforzarme para alcanzarlos. Por parte de los técnicos, siempre me corrigieron lo táctico, movimientos dentro de la cancha, controles orientados y otros recursos”.
En 2021 Saralegui había tenido un año inolvidable, ya que había sido campeón con su categoría (5°división) dirigida por Walter Pico -convirtió en la definición con tiros desde el punto de penal- y en ese momento recibió la convocatoria para la Selección Argentina Sub 20.
En 2022 llegó su primer convocatoria a la pretemporada de la reserva, y en el Monumental se encargó de demostrar al mundo futbolero, quien es él. “Estaba esperando hace mucho este gol, se hizo esperar, pero feliz de que se dio acá que es lo más lindo. Mi viejo y mi familia son todo Riquelmista, así que fue para ellos el festejo que habían venido de Entre Ríos para verme. No fue la mejor actuación, veníamos jugando mejor, pero lo importante es que ganamos y tenemos toda la semana para mejorar”
En Boca hace bastante lo tienen apuntado, saben de su profesionalismo y dedicación. Según se comenta en los pasillos de la Bombonera, Riquelme ilusionado, lo ve como el sucesor de Pol Fernandez, una de sus debilidades en el plantel de primera división.
Si bien, Saralegui muchas veces pasa desapercibido, el joven centrocampista siempre termina siendo determinante y en el último tiempo la dirigencia de Boca, junto con el Consejo de Fútbol, lo comenzó a seguir bien de cerca.
Mientras tanto, Saralegui tiene bien claro su objetivo. Nada ni nadie, le robará su ilusión y él no va a parar, hasta concretar su sueño.
